Fotografia de Antonio Ruescas dando el pregón de Semana Santa. Juan López Docón

Hoy he visto una fotografía mirando en mi archivo del cronista y periodista Antonio Ruescas Cano cuando  dio el pregón de Semana santa en hellin. Espero os guste

Atambores suizos de 1569 y 1575. Antonio del Carmen López Martí

Atambores suizos  de 1569  y 1575. 

En Hellín ya los teníamos en 1569.

Early drums, ca. 1569. In Basel (Switzerland drums)

Miembros de las famosas "Huestes de Rumbica"en el año 1.949 .Juan López Docón

Miembros de las famosas "Huestes de Rumbica"en el año 1.949 cuando trajeron al Resucitado por la derecha, detrás  Luis y Paco Zafrilla al lado Perea al lado del sacerdote derecha Rumba a la izquierda Juan Oñate y el niño creo que es Emilio Ochando  y Castillo segundo izquierdo.

Esta foto es de Luis, el retratista.Juan López Docón

Esta foto es de Luis, el retratista . Fotógrafo de profesión. Le conocen como el retratista. Aunque es de Hellin, aquí le vemos con el torero Paquirri cuando era joven.

16 años sin Mari cielos Cañavate.Juan López Docón.

16 AÑOS SIN MARICIELO CAÑAVATE.

Desde el miércoles 10 de octubre de 2007, ya han pasado 16 años, que la hellinera Maricielo Cañavate, madre de dos hijos, salió de casa para llevarlos al colegio y nunca más volvió ni se supo de ella.

Sus padres, Juana y Antonio, sus hermanas Esperanza, Rosa, Lucía y su hermano Antonio, además de sus propios hijos, ya no tienen más lágrimas para derramar en su recuerdo.

Su padre, ya no tiene escondrijo donde escudriñar en busca de Maricielo. Aquel 10 de octubre de 2007 , terminó con muchas cosas vitales de estas personas.

Juana, su madre, cuando la vemos, muy a menudo le preguntamos y su respuesta, además de su cara muy desmejorada siempre es la misma: “vivo porque estoy aquí, pero qué quieres que te diga? Esto no es vida”. A su padre y sus hermanas, con mirarles a los ojos te lo dicen todo. Solo ves unos ojos tristes.

Cabía, a través de un juicio con un acusado, que su cuerpo, si es que está muerta, apareciera. Pero han tenido tan mala suerte que ni eso. Aquel sospechoso acabo siendo declarado culpable de haberle dado muerte; ingresó en prisión para pocos días después salir en libertad. ¡Culpable, sí! pero no hay cuerpo, no hay carcel. Y van ...16 años.

Desde aquí, con estas letras, deseamos que este recuerdo a Maricielo, sea un homenaje a esta familia. Os deseamos suerte de corazón..

Ya hace este año 17 años de su desaparición 

Maqueta del Castillo de hellin echa por Cañamón. Juan López Docón

Fruto de mucho trabajo, el Maestro Rafael Cañamon, presentará el dia 18 viernes , en el MUSEO , LA MAQUETA DE LA FORTALEZA/CASTILLO  DE HELLIN......Y DE LA LLEGA DEL CID A HELLIN EN EL AÑO 1088

EDIFICIOS CON NUESTRA HISTORIA Juan López Docón

EDIFICIOS CON NUESTRA HISTORIA

Cada vez que paso cerca de este edificio, me recuerda a uno de esos libros abandonados, llenos de polvo y desgastados.

Y me gusta cogerlo entre mis manos, limpiarlo y mirar su interior en el que guarda decenas de historias que pertenecen a cada uno de nosotros.

Todavía, el sonido de la sirena de una ambulancia me transporta hasta ese mismo lugar en Hellín, en verano o en invierno.

Cada vez que lo escuchaba rezaba todo lo que sabía pidiéndole al cielo que no le hubiera pasado nada a mi familia, o conocidos. Cosa rara porque en Hellín casi todos nos conocíamos.

Recuerdo ver la ambulancia, conducida por Martín, parada en la puerta y la gente arremolinándose a la espera de saber lo que había sucedido.

Ese lugar comenzó a despertarme desagrado.

Me acuerdo muy bien de esas cinco o seis escaleras que subíamos, el chirriar de la puerta de cristales al abrirla, y a la derecha estaba el cuarto de curas en el que más de uno de nosotros hemos recibido puntos en cualquier parte de nuestro cuerpo, o, nos ponían las vacunas.

Y también recuerdo la segunda planta. 

Allí nací una Nochebuena, y allí llegaron mis hermanos, mis primos, y mis mejores amigos y amigas de la infancia.

La imagen de ese pasillo era de un lugar frío, las habitaciones muy iluminadas por las ventanas, y una decoración obsoleta, con cunas de acero inoxidable y una cruz sobre las camas.

Cuando lo recuerdo, siempre me pregunto aquello de: ¿Por qué nací en este lugar? Son esas preguntas existenciales que todos nos hacemos. Y siempre me respondo que; no lo sé. Pero lo cierto es que, me alegro de que sucediera.

Ojalá y siempre permanecieran vivos y despiertos los edificios que forman parte de nuestra niñez. Incluso, ya que nos permitimos soñar durante unos segundos: ojalá y en el transcurso de toda nuestra vida estuvieran con nosotros las personas y los lugares.

Los amigos de la infancia. La tienda de las chuches, las viejas escuelas y las mismas calles.

Pero..., hay una cosa que nadie nos puede robar y es esa memoria del tiempo que todos llevamos dentro y, con tan solo un sonido, un olor, una palabra, nos devuelve a ese ayer, nuestro ayer. 

En el que, aunque ya no existan, abrimos puertas, recorremos sus pasillos, y volvemos a sentir...

Porque como dijo un filósofo:

 “La vida no es la que uno vivió, sino la que uno recuerda, y cómo la recuerda para contarla".